Acusan al capitán Paul Watson de dificultar la caza de ballenas.
Agencias
Tokio, 2 de mayo.- Japón emitió una orden de arresto contra el fundador del grupo ecologista Sea Shepherd, el canadiense Paul Watson, por el sabotaje de las actividades de la flota ballenera.
Las autoridades niponas pedirán a la Interpol información de la ubicación del barco de Watson, pero no su arresto internacional. Sólo será detenido por las autoridades locales si pisa suelo japonés, añadió Kyodo, portavoz de la guardia costera. Agregó también que las pesquisas están en marcha.
Watson, de 59 años y fundador de sea shepherd en 1977, es sospechoso de instar al sabotaje de las actividades de la flota nipona ballenera en el antártico y de haber ordenado al activista neozelandés Peter Bethune, arrojar una botella sustancias químicas en la cubierta de uno de los barcos balleneros. El mismo fue detenido en marzo en aguas antárticas tras abordar buque de la flota japonesa. Actualmente está en Tokio esperando su juicio.
Kyodo aseguró que Watson tiene motivaciones políticas claras. “Japón está haciendo todo lo que está a su alcance para evitar que el próximo año trabajar en el Océano Antártico”, añadió.
Según el propio gobierno nipón, las actividades de “obstrucción” del grupo Sea Shepherd impidieron que su flota alcanzara en 2009 (que terminó el 31 de marzo) su objetivo de capturas.
El país asiático cazó en la antártica durante el año pasado un total de 507 ballenas. Casi la mitad de las que se había propuesto según datos de la agencia japonesa de pesca. Aunque el gobierno japonés asegura que la matanza de los cetáceos es para contribuir a la investigación, los ecologistas aseguran que este argumento es una mentira para encubrir fines comerciales.