Señora directora,
Muy tristemente he leído en vuestro diario la decisión del Servicio Agrícola Ganadero de Chile (SAG) de dejar a la elefanta Ramba en manos de quienes la han explotado y maltratado toda su vida, del circo Los Tachuelas.
Estamos si no frente a una mafia, a un organismo estatal corrompido donde reinan los favores y compadrazgos. Y los únicos afectados son los animales. los cuales no tienen voz ni razón para defenserse.
Y las irregularidades en torno al decomiso de animales, zoológicos y otros, no es primera vez que pasan en el SAG.
Que el Estado de Chile destituya a los jefes de este organisno. Que vuelva a ser la misma institución honorable de antaño.
NO A LA CORRUPCIÓN Y JUSTICIA PARA LOS ANIMALES.
Carolina Stein, La Reina.
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