Tras la iniciativa presentada en la Comunidad de Madrid, esta es la segunda que comienza a rodar en una cámara autonómica después de la aprobada con éxito en Catalunya.
Por EUROPA PRESS
El Gobierno andaluz decidió apaciguar al mundo taurino el mismo día que el Parlamento autonómico admitió a trámite una iniciativa legislativa popular (ILP) para abolir las corridas.
Tras la iniciativa presentada en la Comunidad de Madrid, esta es la segunda que comienza a rodar en una cámara autonómica después de la aprobada con éxito en Catalunya. Existe, no obstante, una diferencia crucial: en Andalucía la ILP nace abocada al fracaso y sin ningún partido que, hasta el momento, dé la cara por ella.
La Comisión Investigadora del Maltrato Animal (CIMA), promotora de la iniciativa, tiene ahora que reunir 75.000 firmas en un plazo máximo de cuatro meses desde que la Junta Electoral les notifique la admisión a trámite. Ya cuentan con el apoyo de Los Verdes de Andalucía.
El verdadero reto, sin embargo, llega después. El arco parlamentario no da mucho juego. Ya ha quedado meridianamente clara la postura del PSOE, con mayoría absoluta. El otro partido mayoritario, el PP, ha ido incluso más allá y ha propuesto una declaración institucional en defensa de la “fiesta nacional” para apoyarla de manera “explícita”. Y la esperanza de los antitaurinos depositada en Izquierda Unida parece desvanecerse a marchas forzadas. Ayer, el coordinador andaluz de IU, Diego Valderas, evitó pronunciarse sobre la iniciativa alegando que esta no es un motivo de preocupación ni de los andaluces ni de su partido, informa Europa Press.
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